La historia que me estoy contando

Una herramienta necesaria para nuestras relaciones.

Desde hace varias semanas estoy utilizando una herramienta que vi en el documental “A call to courage” de Brené Brown (super recomendado) que se llama “La historia que me estoy contando”.

Básicamente consiste en que cuando nos sucede algo con otra persona y esa vocecita en la cabeza se enciende y, sin saber cómo, nos hacemos literalmente una película -en general dramática- podamos hacer una pausa y contarle a la otra persona lo que nosotros estamos pensando.

Ejemplo: “La historia que me estoy contando es que no me contestaste en todo el día porque no te importó lo que tenia para contarte”

Usando esta herramienta no sólo me di cuenta de la cantidad de historias que nos contamos por día, sino que muchas veces esos auto-relatos son erróneos, precipitados y lastiman nuestro propio autoestima.

Nuestro cerebro es tan obediente que no distingue si lo que pensamos está sucediendo realmente o es sólo un pensamiento, o nuestra imaginación. Se cree todo lo que le decimos. Entonces, si me digo que a tal persona no le importo, esa información se almacena y guarda como verdadera. Y lo que es mejor (o peor) aún, va a buscar confirmar ese pensamiento cada vez que pueda, para que no nos olvidemos de eso que es “cierto”, reforzando así eso que nos decimos.

Poder compartir con la otra persona y decir en voz alta lo que me estoy contando nos habilita: i) hacernos cargo de qué es lo que nosotros estamos pensando en lugar de ponerlo en el otrx; ii) darle el espacio a la otra persona a que nos cuente su mirada de la situación; iii) identificar patrones en las historias que me cuento habitualmente.

Te dejo algunas preguntas para reflexionar:

¿Qué tipo de historias me estoy contando? ¿Qué personaje estoy siendo en mis relatos? ¿Cómo me hacen sentir las historias que me cuento? ¿Qué historias me gustaría empezar a contarme? ¿Existe alguna historia alternativa que podría ser posible en esta situación? ¿Qué pasaría si empiezo a compartir las historias que me cuento? ¿Qué necesito para poder hacerlo?

Como ya sabrán los que conocen a Brené Brown, para todo esto necesitamos valentía y, por supuesto, vulnerabilidad.

Probálo y me contás.